lunes, 9 de marzo de 2015

El surgimiento del lenguaje escrito: De la escritura pictográfica a la cuneiforme.



Tras unos largos meses en los que el blog ha estado algo abandonado, volvemos con ganas renovadas. Eso sí, intentaremos espaciar un poco las publicaciones en el tiempo, más que nada para no sobrecargar con una frecuencia de contenidos demasiado alta. Por otra parte, los monográficos serán algo más cortos, también con el objetivo de hacer una lectura más amena. Creemos que así se ayudará a asimilar mejor los contenidos. Dicho esto, pasemos al primer monográfico que abre esta nueva etapa en Antiquus, el orígen de la escritura, un tema verdaderamente fascinante. Esperamos que os guste.


La escritura, el soporte gráfico de nuestro lenguaje, ¿qué sería del mundo, de su historia y sus sociedades sin ella? Seguramente, si no existiera, ahora mismo no estaríais leyendo esta entrada ni ningún otro documento, libro, revista o carta que haya existido, exista o existirá. Porque la escritura es el vehículo conductor de ideas de la inmensa mayoría de las culturas y sociedades que han poblado este planeta; es el instrumento del escritor para dar a conocer sus creaciones, el medio de transmisión de los conocimientos que nos ofrece la ciencia día a día, o la expresión por la cual nos llega la información de lo que pasa en el mundo. Pero, ¿cuándo y dónde surgió esta forma de transmitir conceptos e ideas, a veces abstractas, otras no? Veamos en este pequeño monográfico en qué momento de nuestra larga historia surgió la escritura.


El creciente fértil

Mesopotamia y el Levante Mediterráneo

Uno de los primeros sistemas de escritura del mundo antiguo que se conocen se desarrolló en el sur de Mesopotamia entre el 3300 a.C. y el 2900 a.C., la denominada escritura cuneiforme (en forma de cuña). Sin embargo, las evidencias más antiguas conservadas de escritura aparecen ya entre el periodo de Uruk (3800-3200 a.C. y el periodo Jemdet Nasr (3200-3000 a.C.), concretamente en el yacimiento de Uruk (Warka), en los niveles IV y III (1), correspondiendo al 3300-3200 a.C. Estos primeros escritos aparecen en el recinto de Eanna, un santuario consagrado a la diosa Inanna (2), el cual, además, era un edificio administrativo. Los antiquísimos documentos allí hallados en forma de tablillas de barro estaban compuestos por signos pictográficos y numéricos, y se cree que hacen referencia a actividades económicas, lo cual demostraría que una de las razones principales por las que surgió la escritura sería la de dar apoyo a las transacciones económicas, así como ser una herramienta burocrática y administrativa. Este hecho surge cuando las poblaciones comienzan a dotarse de una complejidad social y política importante, así como con la aparición de la arquitectura monumental.


De acuerdo con los estudios estratigráficos realizados, las tablillas más antiguas (siete en total) provienen de una estructura denominada templo C. Sin embargo, unas seis mil tablillas fueron halladas en su mayor parte en antiguos vertederos o en los rellenos utilizados para los cimientos de algunos de los edificios de los niveles antes mencionados. Este hecho sugiere que la utilización de documentos económicos escritos se extendió rápidamente con el paso del tiempo. No obstante, la escritura cuneiforme no fue una invención espontánea de los escribas del complejo de Eanna. Ya desde el Neolítico, en el sur de Mesopotamia, mucho antes de la aparición de las tablillas, se utilizaban bolas huecas y fichas de barro para registrar transacciones económicas, como la que aparece en la imagen inferior.

Bulla o esfera de barro para realizar operaciones económicas


Imágenes y números

Como decíamos, cuneiforme significa "en forma de cuña", en alusión a la punta triangular del cálamo, cuyos signos triangulares se combinaban con líneas. Las tablillas más antiguas de Uruk, también denominadas "protocuneiformes", presentan un complejo sistema de signos logográficos y números-metrológicos. Se piensa que estos logogramas o pictogramas están inspirados en el repertorio pictórico de representaciones en sellos y en otros medios visuales. Por ejemplo, el haz de juncos que representa a Inanna en la escritura pictográfica también aparece con bastante frecuencia en impresiones de sellos y en jarrones de alabastro. De esta fase más antigua se han identificado aproximadamente 900 signos. Los pictogramas iconográficamente explícitos grabados en las tablillas "protocuneiformes" fueron reduciéndose de forma paulatina gracias a la eficacia cada vez mayor del uso del cálamo y a la múltiple combinación de las marcas básicas cuneiformes (una cuña y una línea).




Como las tablillas arcaicas de Uruk eran totalmente pictográficas y numéricas, permitían añadir escritura jeroglífica, signos fonéticos y/o silábicos y afijos gramaticales. Entre las tablillas de Ur, del 2800 a.C., se han detectado indicios de sumerio, una lengua que no se puede relacionar con ninguna otra lengua de la historia del mundo, no es ni semítica ni, por supuesto, indoeuropea. Se hablaba en el sur de Mesopotamia hasta que, a partir del II milenio a.C. quedó limitada al ámbito estrictamente cultual. Por su parte, la escritura cuneiforme sería adoptada por el acadio escrito, la lengua semítica común de la historia de Mesopotamia.
Tanto para el sumerio como para el acadio, en la forma más compleja de escritura y a lo largo de su uso escrito, los signos cuneiformes fueron adquiriendo múltiples valores, de modo que pasaron a utilizarse como sílabas o ideogramas para formar una palabra. El sistema de escritura necesitaba una compleja combinación de los dos, lo que hacía que fuese bastante difícil de seguir. La escritura alfabética no sería introducida en Mesopotamia hasta la Edad del Hierro, en concreto con el arameo, que surgió del fenicio hacia el 900 a.C. 


Carlos Alberca



Bibliografía

  • CREMIN, Aedeen. Arqueología: Los yacimientos arqueológicos y los tesoros culturales más importantes del mundo, BLUME, Barcelona, 2013.

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1) Niveles estratigráficos del yacimiento arqueológico.

2) Diosa sumeria del amor, la guerra y protectora de la ciudad de Uruk.

2 comentarios:

  1. Me alegro de la vuelta del blog, y que lo haya hecho con un tema que me gusta, y más si tiene que ver con Mesopotamia y esa era tan remota del período de Uruk. Tenía nociones acerca de la escritura cuneiforme, pero me faltaban detalles y datos, algo que esta entrada ha venido a completar. Únicamente tengo una duda o una pregunta: ¿lo de los tipos A y B de escritura lineal tenían algo que ver con la cuneiforme y con estos períodos?.

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    1. No tiene que ver. La escritura Lineal A es minoica, oriunda de la isla de Creta y se desarrolló entre el 1600 y el 1400 a.C. y la Lineal B corresponde a la civilización micénica, desarrollándose entre el 1500 y el 1100 a.C. De hecho la Lineal A influyó en el desarrollo de la B, como constatan más de cincuenta signos coincidentes.

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